Es con profunda tristeza que el Centro Internacional de estudios del deporte (CIES) supo de la muerte de Jean-Louis Juvet, Presidente de su junta directiva desde 1999 a 2008.
Jean-Louis Juvet nació el 12 de julio de 1930 en Fontaines, en el cantón de Neuchâtel, donde su padre era administrador municipal. Asistió a la escuela de comercio, y después a la Universidad de Neuchâtel donde obtuvo una licenciatura en economía en 1953. Después de un período de estudio en la Universidad de París, regresó a Neuchâtel para escribir una tesis y se convirtió en doctor en ciencias económicas en 1956. Como anécdota, pagó sus estudios siendo instructor de esquí, ignoraba entonces que presidiría un día el CIES, pero ya existía un claro interés por el deporte. Jean-Louis practicó esquí hasta el invierno pasado.
Con su doctorado en la mano, volvió a París, donde fue contratado como funcionario de la Organización Europea de Cooperación Económica, (que más tarde se convirtió en la OCDE). En el seno de esta organización, participó en la implementación del Plan Marshall, el programa estadounidense de ayuda para la reconstrucción europea. En 1964 la Universidad de Neuchâtel lo contrató como profesor de economía aplicada "ad personam" con el apoyo del Fondo Nacional Suizo de Investigación. Compaginó durante treinta años su carrera como profesor en la Universidad, Director General del “Comité Internacional de Rayón y Fibras Sintéticas” en Francia y Consultor Internacional en Europa, particularmente en París y Bruselas. Mientras tanto, Jean-Louis Juvet también sirvió como Vice-Canciller de la Universidad de Neuchâtel, de 1971 a 1975. Además, participó en la creación del Instituto de Comercio Mundial (World Trade Institute, Berna, Suiza) en la década de los 90. Fue un hombre muy activo y con multitud de intereses.
En el momento de su jubilación, se convirtió en miembro del CIES en los meses que siguieron a la creación de esta Fundación y después Presidente voluntario de esta misma, porque tenía tiempo solía decir. Es a él a quien debemos la creación del Máster Internacional en Humanidades, Gestión y Derecho del deporte, más conocido como FIFA Master. La idea sedujo a la FIFA, a la Universidad de Neuchâtel, a la De Montfort University en Leicester (Reino Unido) y a la Bocconi School of Management en Milán (Italia) que se unieron al proyecto del CIES. Un éxito que cuenta ya con 450 graduados desde entonces. Jean-Louis acostumbraba a decir que debería ser él quien pagara por trabajar puesto que encontraba su labor muy apasionante. De hecho, él era un hombre muy entusiasta y muy implicado en todo aquello en lo que participaba.
Es justo destacar que desde 2003, Jean-Louis Juvet supervisó la creación y el desarrollo de la Red Universidad Internacional FIFA/CIES. Supo infundir los principios que guían el trabajo de las 16 universidades, es decir, respeto, apertura al mundo y espíritu de equipo.
Autoritario sin ser totalitario, gustaba de guiar y persuadir. Visionario y dinámico, su profundo respeto por todo el mundo, su bondad, su cultura, su cálida personalidad hicieron de él una persona cuya compañía era apreciada por todos y por todas partes. En 2008, durante la ceremonia de graduación de la "FIFA Master' Jean-Louis Juvet recibió el título de Dr. Honoris Causa por la Universidad De Montfort. Merecido reconocimiento y un regalo porque ese día era, casualmente, su cumpleaños.
Entusiasta y conocedor de la música clásica, podía reconocer una pieza escuchando tres notas. También trabajó como Presidente de la Asociación de Juventudes Musicales Suiza.
Casado con Magdalena, padre de tres hijos y abuelo de cuatro nietas, gustaba de invitar a su casa a sus colegas y amigos y cocinar un buen risotto o hacerles degustar el pastel mantequilla, una especialidad de Neuchâtel, que él mismo hacía en su horno de leña en el jardín. Amante de la montaña y las largas caminatas con su perro, también vendimiaba las viñas de su hijo con la misma energía que ponía en todo lo que hacía. Jean Louis fue tan dinámico y joven de corazón, que parecía inmortal. Lamentablemente, no existe la excepción y se ha ido un gran hombre.
El CIES le debe mucho y estamos muy agradecidos. Extendemos nuestra simpatía y nuestros mejores deseos a su familia.